"Cuando Jason Collins anunció que era gay me emocioné. Pensé que tal vez, solo por tal vez, estamos al borde de una era en la que las personas acepten y celebren las diferencias de los otros. Creo que esas diferencias hacen la vida más bella: cada persona es diferente y todos podemos aprender unos de los otros", escribe Griner.
La nueva jugadora de las Phoenix Mercury cuenta que sufrió insultos y acoso en su infancia: "Nadie merece pasar por eso, fue duro" y desvela que, tras "salir del armario", "la gente me dice cosas horribles en internet".
"En el instituto sufrí acoso de todas las maneras imaginables... y lo peor fueron los abusos verbales. En séptimo cambié de instituto, y las burlas sobre mi aspecto, altura y sexualidad fueron continuas", dijo
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