Una vez Carmelo Anthony concluya su participación durante el fin de semana en las actividades del Carmelo Anthony Foundation que se desarrollan en Puerto Rico, el jugador de los New York Knicks se concentrará en la misión de llevar al conjunto a mejorar la pasada temporada en la que se quedaron a unos pasos de alcanzar la Final de la NBA.
El delantero anotador de la tradicional franquicia, que busca su primer cetro desde 1973 y apenas su tercero desde que se estableció el conjunto en la ciudad en el 1946, solo le resta añadir precisamente esta sortija a su impresionante resumé, que incluye medallas de oro olímpicas en Beijing 2008 y Londres 2012, así como un campeonato a nivel colegial con la Universidad de Syracuse antes de ingresas a la mejor liga del mundo en el 2003.
"Pienso que es un equipo totalmente diferente, que estaba muy veterano", expresó Anthony recientemente al comparar la nueva edición 2013-2014 de los moradores del Madison Square Garden que pertenecen a la División Atlántico de la Conferencia Oriental. "Ahora tenemos otro buen equipo; paso a paso y sin hacer ruido, que es lo que me gusta".
El jugador que recién cumplió 29 años reflexionó sobre la actuación del quinteto en el pasado torneo y se mostró contento al destacar a ESPNDeportes.com que "ganamos 50 juegos por primera vez en mucho tiempo, que es un buen escalón para lo que nos espera. Ahora, lo que debemos es enfocarnos como equipo, e ir paso a paso".
"Me gusta ir de esa manera. Cuando la temporada empiece todos estamos en 0-0 y todos tienen la misma oportunidad de ganar el campeonato", especificó el joven veterano que irá a su undécima campaña en la NBA, tras ganar el campeonato de anotaciones en el pasado torneo al promediar 28.7 puntos por juego.
Sobre la rivalidad que comenzaron los Knicks y Nets, que apenas se distancian de sus respectivas sedes en Manhattan y Brooklyn, el cinco veces Todos Estrellas restó importancia a los movimientos realizados por sus oponentes que ahora tendrán como dirigente a su ex compañero Jason Kidd, que debutará en esa capacidad con una impresionante plantilla que incluye a veteranas figuras como Kevin Garnett y Paul Pierce procedentes en cambio desde Boston, al igual que Jason Terry y el ruso Andrei Kirilenko mediante la agencia libre.
"El año pasado comenzamos esa rivalidad, pero no sé si se va a convertir en una de las mayores rivalidades en el deporte. Lo que ellos hicieron en la temporada muerta, de realizar uno de los cambios mas sonados, hay que ver como ellos pueden aglutinar esos movimientos", analizó el jugador que curiosamente nació en Brooklyn.
"Nosotros estamos motivados y seguimos en Nueva York, con el nombre de Nueva York en nuestro pecho. Vamos a seguir adelante con todos los retos y veremos qué pasa", añadió el copioso anotador, quien ve como positiva la integración al equipo dirigido por Mike Woodson de Andrea Bargnani, Metta World Peace y Beno Uldrich.
En cuanto a su regreso a la selección estadounidense para defender la medalla dorada, Anthony fue cauteloso a la hora de garantizar su participación en el llamado 'Dream Team'. El tema es de interés para la escuadra, que ya no contará con Lebron James al anunciar que no jugará en el máximo evento mundial deportivo a celebrarse en Brasil en el 2016.
"No puedo comprometerme en este momento, ya que es un muy distante. No sé qué va a pasar de aquí al 2016. (Por eso) No quiero comprometerme tan temprano. Llevo en el baloncesto de Estados Unidos desde que tenía 16 o 17años, y ahora tengo casi 30", precisó.
"Siempre he estado dispuesto a representar a USA, pero no puedo comprometerme en este momento. Me veo en la posición de tomarme mi tiempo. Cuando llegué el momento tomaré la decisión", insistió.
Acto seguido aclaró que no jugará por Puerto Rico, aunque en un momento se especuló que cambiaría su camiseta internacional. "No sé si esto es posible ahora, pero pienso que no podré hacerlo. Tuve la oportunidad a los 16 años cuando vine a Ponce, pero uno de los coaches me dijo que no estaba listo para jugar", dijo en referencia a sus primeros pasos en el deporte de las canastas en la que practicó con un equipo de la liga de Baloncesto Superior Nacional de la Isla del Encanto, sin querer precisar el nombre del dirigente del hecho ocurrido en la década de los noventa.
Anthony contó que en sus días de vacaciones en suelo caribeño "una persona me trajo un artículo de esa época, y fue interesante el recuerdo. Pero con mi legado aquí en la Isla, aun cuando represento a Estados Unidos, siento que también represento dignamente a Puerto Rico", finiquitó el canastero, que lleva tatuado en su mano la bandera puertorriqueña, dejando claro que desea mantener su rol de modelo para la niñez y fanaticada en cuanto al uso de esteroides, que aseguró de manera categórica "nunca lo he visto" en la NBA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario