A Kobe Bryant no le gusta la idea, pero la acataría de todos modos si los Lakers optan por sentarlo en la banca para toda la temporada en vistas de lo que consideran una campaña de la NBA perdida para el equipo de Los Angeles.
"Es una pregunta difícil para mí", dijo Bryant a la perspectiva de que se mantenga sin jugar buena parte de la actual zafra debido a sus lesiones y edad. "Quiero jugar. Pero al mismo tiempo, entiendo la posición del entrenador. Voy a hacer lo que me pidan que haga", añadió el superastro de 36 años que ha guiado a los Lakers a cinco campeonatos.
El tema está en el candelero luego de lo inconsistente que se ha mostrado Kobe tras regresar de un año de ausencia debido a lesiones en sus piernas.
En diciembre, Bryant sobrepasó al ícono de la NBA Michael Jordan en el tercer lugar de la lista de anotadores de todos los tiempos de la liga. Pero sus buenas actuaciones esta temporada han sido eclipsadas por noches de mala puntuación y un juego inusual de frecuentes pérdidas de balón.
La noche del jueves fue uno de los juegos buenos para Bryant, que repartió un récord personal de 17 asistencias y anotó 19 puntos, con sólo tres pérdidas de balón. Pero su esfuerzo fue en vano, ya que los Lakers perdieron frente a los Cleveland Cavaliers de LeBron James.
Su récord previo era de 15 asistencias, y lo había logrado en 2002, precisamente ante otra leyenda: Michael Jordan.
"Tiene un nivel extra y se concentra aún más cuando es contra alguien como LeBron", aseguró Byron Scott. "Su propósito en esa situación se eleva hasta las nubes".
Los aficionados en la arena Staples Center de Los Angeles gritaban "¡Queremos a Kobe!" cada vez que el astro estaba en el banquillo, pero el entrenador de los Lakers, Byron Scott, se mantuvo apegado a su compromiso de limitar estrictamente los minutos de Bryant en un intento por mantenerlo saludable.
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