NBA Tres Mavericks vuelven a Dallas con lesiones

Los Dallas Mavericks regresan a casa para el Juego 3 de las Finales de NBA con lesiones en tres jugadores fundamentales.

La más preocupante es la del alero estrella Dirk Nowitzki, quien sufrió una torcedura de tendón de su dedo medio de la mano izquierda en el juego debut. Jugó con la lesión en la increíble victoria de los Mavericks 95-93 en el Juego 2 de la serie, el jueves por la noche.

Nowitzki, quien anotó 24 puntos, incluyendo una bandeja de zurda que definió el partido, dijo que el dedo estaba bien.

"Creía que no me iba a molestar antes del partido y fue así", dijo Nowitzki. "Podemos tener el vendaje un poco más liviano, por lo que podré tener contacto directo con la pelota".

Brendan Haywood, centro reserva, dejó el partido con 11:30 por jugar con una lesión en la parte derecha de la cadera. Haywood, quien jugó sólo ocho minutos, no retornó. Los oficiales de equipo dijeron el jueves por la noche que la lesión no era nada serio, pero Rick Carlisle dijo el viernes en Galloway & Co. en 103.3 FM ESPN que el status de Haywood para el Juego 3 es poco claro.

"Sabremos más el sábado. No se sentía bien cuando dejó el partido", dijo Carlisle. "Si está disponible para jugar, seguro que lo hará. De lo contrario deberemos ajustar".

Haywood hizo una falta a propósito para poder salir del juego. Inmediatamente se fue para el vestuario y no regresó a la acción.

El escolta Jason Terry participó con una lesión en su muñeca derecha y recibió tratamiento durante el partido. Usó una protección en su muñeca al comienzo del segundo tiempo mientras se sentaba en el banco, pero se la quitó para reingresar.

El sexto hombre de los Mavericks dijo que se lastimó la muñeca mientras intentaba una volcada en el Juego 1 y la lesión lo molestó algo el jueves.

Terry, quien falló con su tiro algunas veces, terminó con 16 puntos y 5-11 en tiros de campo. Durante el regreso en el último cuarto, anotó seis puntos consecutivos para empezar la proeza de su equipo.

"Tuve partidos en mi carrera donde no encontré el rumbo", dijo Terry. "Estuve pésimo en tres cuartos del juego y luego, boom, en el último período la luz apareció".