El cinco veces campeón de la NBA y dos veces ganador del oro olímpico, había indicado previamente que quería tener una última experiencia en las justas, y muy seguramente hubiera recibido fuerte consideración por una plaza en el equipo que irá a la cita de Brasil. Bryant hizo el anuncio en Salt Lake City, previo al partido que sus Lakers de Los Ángeles iban a disputar en esa ciudad ante el Jazz de Utah. Comunicó su decisión al director ejecutivo de la Federación de Basquetbol de Estados Unidos, Jerry Colangelo, y al entrenador de la selección Mike Krzyzewski.
"Desde que anuncié mi retiro, he podido admirar a mis colegas con otra visión", dijo Bryant, campeón olímpico en 2008 y 2012. "Acepto la realidad que ellos son el futuro de este deporte. Ellos son los que se merecen las plazas en Río. Ellos son los jugadores que la gente debe admirar y alentar. Ellos son los jugadores que deben mostrarle a los fanáticos el rumbo de este deporte". De cierta manera, Bryant había dado pistas sobre sus intenciones el jueves, cuando mencionó que era hora de que otros "puedan demostrar cuántos campeonatos pueden ganar, a ver cuántas medallas de oro pueden ganar". El sábado, Bryant fue directo: "Ya pasó mi momento", acotó en una rueda de prensa. Bryant contó que le había dicho a por lo menos un jugador sobre su intención. Cuando los Lakers enfrentaron de visita a Golden State la noche del jueves, mencionó que el escolta brasileño de los Warriors, Leandro Barbosa, se le acercó y le dijo: "Te veo en Río". "Me di la vuelta y le dije no", señaló Bryant.
El tercer máximo anotador en la historia de la NBA indicó que le preocupaba quedar convocado en el plantel de 12 jugadores para luego lesionarse y no poder jugar, al considerar que ha sufrido varias de gravedad en años recientes. Consideró que podría socavar las posibilidades de oro de Estados Unidos, además de dejar fuera a un jugador joven merecedor de ir a Río.
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