lunes, 31 de enero de 2011

La Conferencia Nacional aprovechó una primera mitad de 42 puntos para imponerse por marcador final de 55-41 a la Conferencia Americana en el Pro Bowl


El cornerback DeAngelo Hall atrapó una de las cinco intercepciones de su equipo el domingo y regresó un balón suelto 34 yardas para touchdown, ayudando a la Conferencia Nacional a ganar el Pro Bowl 55-41 sobre la Americana.

Hall fue nombrado Jugador Más Valioso en un partido que no fue tan interesante como pudiera sugerir el marcador final.

Philip Rivers, quarterback de la Conferencia Americana, Peyton Manning y Matt Cassel lanzaron cada uno para intercepción en la primera mitad, ayudando a la NFC a construir una ventaja aplastante de 42-0 en un desempeño feo incluso para los estándares históricamente bajos de este juego.

En consonancia con este extraño encuentro, el centro Alex Mack, de los Browns de Cleveland, anotó el último touchdown en una jugada de pase de 67 yardas que tuvo dos pases laterales cuando restaban 16 segundos por jugarse.

Jon Beason, de Carolina, regresó 59 yardas el quinto pase interceptado a la AFC, y el segundo a Matt Cassel, para el último touchdown de la Nacional. Con ello igualó la mayor anotación de un equipo en el Pro Bowl, registrada en el triunfo de la Conferencia Nacional por 55-52 en el 2004.

Después de que sus Patriots —favoritos para ganar el Super Bowl— cayeron en su juego divisional contra los Jets de Nueva York, el entrenador Bill Belichick de Nueva Inglaterra tuvo que ver a su escuadra de la Americana arreglárselas a duras penas durante la primera mitad.

El Pro Bowl es, por naturaleza, un asunto relajado, aparentemente disputado a media velocidad por jugadores cuya mayor preocupación es subirse al avión de regreso sin una lesión.

Sin embargo, la AFC llevó esa actitud a un extremo incómodo al principio al quedar atrás por una desventaja enorme.

NBA: Lo que ocurrió ante los Celtics tiene remedio, pero requiere trabajo y disciplina


Los Lakers y los Celtics se vieron las caras por primera ocasión esta temporada el domingo, y la cara que lucieron los muchachos de Boston no pareció agradar al más famoso de los equipos angelinos, que inclusive careció de famosos en primera fila, como es la costumbre.

Paul Pierce anotó 32 puntos, Ray Allen aportó 21, Kevin Garnett registró 18 unidades y 13 rebotes y los Celtics ganaron con pizarra de 109-96 en el hogar de los Lakers, el Staples Center.

Los números reflejarán que Kobe Bryant encestó 41 puntos por segunda vez en la temporada. Pero también reflejan un dato preocupante: Bryant, que promedia casi cinco asistencias por juego, no tuvo ninguna.

O sea, que podríase decir que el dos veces JMV prácticamente jugó solo. Al menos, eso hizo en el periodo final luego de que la ventaja de cuatro puntos en la primera mitad se evaporó y el juego se volvió todo Celtics, dominando el verde en tierra púrpura y dorada.

Bryant hizo 11 disparos en el cuarto periodo, acertando cinco. Y los otros que intentaron canastos, no encontraron el aro. De hecho, Bryant encestó la mitad de los puntos del último periodo, dividiéndose tres jugadores la otra mitad.

En una buena parte del juego, los Lakers lucieron cansados y desorganizados. Sólo la acertada puntería en la primera mitad por parte de Bryant los mantuvo en juego, sumado a las pérdidas de balón de los Celtics, que lo entregaron en 15 ocasiones. Los angelinos, sin embargo, no supieron aprovecharse de los errores de sus rivales. De los 15 errores de Boston, apenas anotaron dos puntos más que sus rivales, que aprovecharon las ocho erratas de los Lakers para hacer 13 puntos.

Pero debe ser más preocupante para los Lakers el dominio total de Boston en la pintura en el movimiento ofensivo.

Boston, sin Shaquille O'Neal debido a problemas de faltas personales, dominó las tablas 43-30, 34 de estos rebotes defensivos, evitando que los Lakers tomaran segundos intentos. En al menos dos ocasiones, cuando Bryant ejecutaba sus intentos, los cuatro jugadores se movían hacia la derecha de la cancha, dejándole el camino libre bajo las tablas a los jugadores Celtics.

En las asistencias, ni hablar...

Rajon Rondo tuvo 16, seis más que todo el equipo de Los Ángeles, mientras el equipo sumaba 34. Por si olvidó la definición de asistencia, esto quiere decir que en 34 ocasiones se localizó a un compañero para ejecutar anotaciones, que si multiplicamos por dos puntos (al menos) los jugadores de Boston entregaron el balón para que sus compañeros anotasen al menos 68 puntos.

En las asignaciones defensivas, los Lakers están fallando malamente. En el segundo tiempo, el celta Nate Robinson se quedó solo en dos ocasiones en el área de la pintura porque nadie quedó pendiente de él. No es que los Lakers no estén defendiendo, es sencillamente que están teniendo lapsos peligrosos, no dignos de un equipo que ha ganado dos cetros en manera consecutiva.

Uno de los problemas es la inconsistencia que ha tenido Pau Gasol. Siempre he dicho que el español es vital en las aspiraciones de los Lakers, y ante equipos como los Celtics tiene que tener un partido de excelencia si desean saborear el campeonato tres veces consecutivas.

¿Quiere esto decir que los Lakers corren peligro de quedarse a mitad de camino?

No, los Lakers reflejan el segundo mejor récord del Oeste y el quinto en la liga y tienen un buen equipo como para recuperarse y revalidar su campeonato.

Pero al Zen Phil Jackson le quedará mucho trabajo de por medio. Lo que ocurrió el domingo ante los Celtics tiene remedio, pero requiere trabajo y disciplina por parte de sus jugadores y la consistencia de al menos la plantilla titular: entre Ron Artest, Derek Fisher y Gasol apenas anotaron 18 puntos.

El propio Bryant lo señaló a ESPNLosAngeles.com posterior al partido. "No estamos jugando bien ante estos equipos", apuntó el escolta, al referirse a la pobre marca de 1-5 ante equipos élites como San Antonio, Boston, Chicago y Miami.

Si los Lakers quieren verse las caras nuevamente con los Celtics en una posible final y ver repetidos estos resultados, tienen que amarrarse las mangas... lo anterior sin tomar en cuenta a sus rivales élites en el Oeste.

domingo, 30 de enero de 2011

MLB Los mejores prospectos del 2011


Bienvenidos a la cuarta edición anual de mi ránking de los 10 mejores prospectos en el béisbol. Con muchísimos estrenos impresionantes de prospectos principales en el 2010, incluyendo los cinco mejores prospectos de esta lista del año pasado (Jason Heyward, Stephen Strasburg, Buster Posey, Carlos Santana y Mike Stanton), la parte superior de la clasificación se ve completamente diferente, pues la mayoría de los jugadores de ligas menores con gran potencial siguieron trabajando en Clase A el año pasado.

La clasificación se limita a jugadores que aún tienen elegibilidad como novato; eso significa que ellos todavía no exceden 130 turnos al bate o 50 entradas lanzadas en las mayores y no han pasado 45 días en la plantilla activa de un club de grandes ligas, excluyendo aquellos ascendidos durante el período de expansión de plantillas a partir del 1ro. de septiembre. (Un jugador afectado por esto es Jenrry Mejía de los Mets, quien ya no califica como novato.) Solamente los jugadores quienes hayan firmado contratos profesionales son eligibles. Al clasificar a jugadores, yo considero informes de cazatalentos sobre los jugadores -- usualmente los míos, suplementando con conversaciones con otros escuchas y altos ejecutivos como sea necesario -- así como rendimiento, ajustado por edad y contexto. He hecho un ajuste en mi filosofía de clasificar, favoreciendo a los prospectos de mayor potencial los sobre prospectos de tope salarial más bajo que están más cerca de las mayores. Esto refleja mejor cómo estos jugadores son valorados ahora por los directivos y los departamentos de cazatalentos y me da una oportunidad de brindar más información sobre los prospectos cuyos nombres o informes de cazatalentos puedan ser nuevos para ustedes.

Yo utilizo la escala 20-80 en estos comentarios para evitar decir "promedio" y "por encima del promedio" miles de veces a lo largo de 100 comentarios sobre jugadores. En esa escala, una puntuación de 50 equivale al promedio de grandes ligas; 55 es por encima del promedio, 60 es plus, 45 es marginal o por debajo del promedio, etcétera. Mike Stanton tiene 80 en puro poder. Bengie Molina tiene 20 en velocidad. Una recta promedio para un diestro es 90-92, con 1-2 mph menos para un zurdo.

He incluido el ránking del año pasado para aquellos jugadores que aparecieron en los mejores 100 la pasada temporada baja. Un jugador "inelegible" (IE) aún era amateur a esta altura el pasado enero, mientras que un jugador "no clasificado" (UR, por sus siglas en inglés) era elegible pero no pasó el corte. También he etiquetado a jugadores que estuvieron en la lista del año pasado de prospectos que podrían sorprender o la lista de 10 jugadores que justo se perdieron el corte.

Ranking Jugador
10 Aaron Hicks

Edad: 21 (Fecha: 2 octubre 1989)
Batea: Ambidiestro Tira: Derecho
Posición: Jardinero
Organización: Mellizos Minnesota
Nivel más alto '10: A (Beloit)
Ranking 2010: 19

Hicks tomó un paso hacia adelante en el 2010 al transformar sus herramientas en rendimiento de béisbol. Él es un verdadero jugador de cinco armas, con brazo de 80 en los jardines, velocidad por encima del promedio, poder plus a futuro y excelente velocidad de bate. Batea mucho más fluido del lado derecho, con mejor balance y transferencia de peso, y fue obvio este año en su división de platoon, ya que bateó para solo .248/.383/.339 contra diestros aún cuando él estaba repitiendo el nivel.

Su disciplina al plato sigue mejorando, y hay bastante espacio ahí para adquirir poder cuando se fortalezca, pero la incapacidad de conectarle a lanzadores diestros es asunto muy preocupante que deberá resolverse, quizás haciendo que él renuncie a batear ambidiestro si eso no mejora. En cuanto a herramientas únicamente, Hicks está entre los mejores cinco prospectos del deporte, y todavía espero que él se convertirá en una estrella, pero existe algo de riesgo aquí y yo entiendo por qué los Mellizos se la están tomando un poco con calma en relación a él.

NBA: CELTICS 109, LAKERS 96



Paul Pierce anotó 32 puntos, Kevin Garnett tuvo 18 unidades y 13 rebotes jugando con un largo vendaje sobre una cortada en su cabeza, y los Celtics de Boston ganaron el domingo por 109-96 a los Lakers de Los Angeles a pesar de que Kobe Bryant encestó 41 puntos.

Ray Allen encestó 21 puntos por los Celtics en el primer enfrentamiento entre estos adversarios de hace mucho tiempo desde que Los Angeles borraron una desventaja de 13 unidades para vencer por 83-79 a Boston en el séptimo juego de la serie de campeonato de la NBA en junio pasado, terminando la misma de una manera dramática.

Bryant logró su punto 27.000, pero no pudo encender a sus compañeros de equipo y cayeron ante el mejor equipo de la División Este.

El español Pau Gasol tuvo 12 puntos por los Lakers, quienes perdieron por cuarta ocasión en sus últimos siete encuentros.

El Pro Bowl vuelve a Hawai #probowl


Mike Smith, entrenador en jefe de los Falcons, cree que no será muy difícil planear jugadas el domingo para sus astros de la Conferencia Nacional en el Pro Bowl.
Smith

Smith

"Pienso que no va a haber muchas diferencias a la ofensiva y a la defensiva", afirmó Smith. "Creo que el mayor desafío son los equipos especiales, porque muchos de estos señores no han participado en esa faceta. Pero tenemos un plan para ello".

El Pro Bowl ha regresado al archipiélago de Hawai, un sitio de donde muchos jugadores piensan nunca debió haberse ido.

A pesar de las quejas de los atletas oponiéndose a efectuar el evento en una ciudad que suelen visitar durante la temporada regular, el año pasado la NFL envió a Miami el partido de sus mejores representantes. También fue programado antes del Super Bowl, un experimento para atraer más atención y televidentes.

Hawai, que en 1980 comenzó a ser sede del encuentro de estrellas, está pagando 4 millones de dólares por partido para albergar el Pro Bowl ese año y en el 2012. Aún no se ha determinado qué ciudad será la anfitriona después.

El índice de audiencia subió para el duelo entre la AFC y la NFC televisado en ESPN el año pasado. Fue visto por unos 12.3 millones de televidentes en promedio, la mayor cantidad desde el 2000 y un incremento del 40 por ciento en comparación con el Pro Bowl anterior en Honolulu, transmitido por la cadena NBC, el cual fue visto por 8,8 millones de personas cuando el evento se realizaba después del Super Bowl.

Este año, aunque el juego ha vuelto a Hawai, la NFL sigue apegada a su estrategia de mantener el Pro Bowl antes del Super Bowl.

"Es evidente que nuestros aficionados han respondido al cambio en el formato", dijo Ray Anderson, vicepresidente ejecutivo de operaciones de fútbol de la NFL. "Creemos que es excelente para la NFL. Pensamos que es magnífico para el estado de Hawai".

El cambio significa que en el Pro Bowl no habrá jugadores de los Pittsburgh Steelers ni de los Green Bay Packers, pues se están preparando para el Super Bowl a disputarse en Arlington, Texas, el 6 de febrero.

En ese Super Bowl participarán 10 jugadores seleccionados para el Pro Bowl, incluyendo seis de los Packers.

Super bowl calienta motores

La NFL está a la espera de romper el récord de asistencia para el primer Super Bowl en el Cowboys Stadium.

El portavoz de la liga, Brian McCarthy, dijo que se estima que un total de 105,000 espectadores sigan el gran juego el próximo seis de febrero en el estadio de la zona suburbana de Dallas-Fort Worth.

McCarthy agregó que cerca de 95,000 aficionados estarán en las bancas y suites en el interior del estadio, junto con unos cinco mil miembros entre el staff, personal del estadio y medios de comunicación.

Aproximadamente 5,000 personas pagaron $200 cada uno para estar fuera del estadio para ver el partido en pantallas gigantes.

El récord de 103,985 se estableció en el Super Bowl de 1980 en el Rose Bowl de Pasadena, California, cuando los Pittsburgh Steelers derrotaron a Los Angeles Rams. Esta ocasión, los Steelers se enfrentarán a los Green Bay Packers.

Un récord podría superar, incluso, la población actual de Green Bay, que se estima en 104,000 personas.

MLB Hablemos en plata


Esta semana, echamos un vistazo al mundo del béisbol de la manera en que los analistas financieros evalúan a las corporaciones. ¿Qué equipos llevan sus ganancias hasta el máximo? ¿Qué equipos demuestran ineficiencia crasa?

En resumen, ¿quién tiene un mejor rendimiento -- y el menor -- relativo a sus gastos?

Para contestar la pregunta anterior, comparamos a los equipos bajo una métrica sencilla y de sentido común: Dinero gastado en nómina de jugadores por cada victoria de temporada regular. Al considerar las cifras salariales más recientes y acertadas, también examinamos qué equipos han sido juiciosos con su dinero, y cuáles han derrochado su dinero como buenos idiotas.

Los cinco mejores


1. Padres de San Diego

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$37,8 millones
90
$420.000

¿La mala noticia? Los Padres terminaron en segundo lugar en el Oeste de la Nacional tras perder una ventaja de 6,5 juegos sobre los Gigantes. ¿La buena noticia? Nadie esperaba que San Diego fuera un equipo contendiente -- no con la segunda nómina más pequeña en las mayores. Pero aprovecharon el gran ecualizador financiero del béisbol: buenos lanzadores jóvenes que todavía no son elegibles para el arbitraje. Detrás del as de rotación Mat Latos, preparadores como Luke Gregerson y Mike Adams, y el cerrador Heath Bell, los Padres sólo permitieron 3,6 carreras por juego, la menor cantidad en Grandes Ligas. Juntos, esos cuatro lanzadores ganaron menos de un tercio ($5,82 millones) de lo que se ganó Barry Zito de San Francisco ($18,5 millones). Si cualquiera de sus jugadores, además del bate a bajo costo de Adrián González, hubiese bateado -- San Diego marcó .689 de OPS para el cuarto lugar más bajo en las mayores -- los Padres hubiesen llegado a los playoffs. Por cierto, hay algunas cosas, como la ofensiva, que el dinero sí puede comprar.

Barato y bueno: Por unos $416.500, Gregerson fijó un nuevo récord de temporada con 40 retenciones.


2. Piratas de Pittsburgh

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$34,94 millones
57
$613.000

¿Están contentos los Piratas con gastar una minucia, perder juegos por montones y generar buenas ganancias por el aporte colectivo entre todos los equipos de la liga? ¿Realmente están tratando de conjugar un equipo competitivo sobre el terreno por una nómina razonable, y simplemente se trata de que son muy, muy malos al intentarlo? Esta es la verdad: Luego de casi dos décadas de futilidad, Pittsburgh sí recibe buen talento por su dinero pero en un sentido estrictamente relativo a las ganancias financieras. ¿Acaso gastar $613.000 por victoria es realmente un baratillo cuando en dichas victorias hay que ver a Akinori Iwamura y Andy LaRoche ahorcarse en el plato? ¿Cuando ninguno de los lanzadores abridores tiene efectividad por debajo de 4.00? ¿Cuando ellos tienen posiblemente una de las peores defensas de las mayores? Tal vez esos $613.000 se convierten en dinero perdido. Tal vez los Piratas serían un mejor equipo si gastaran menos dinero y cargan el roster de puros prospectos.

Barato y bueno: Al subir de las menores José Tábata ($400.000) bateó promedio de .299 con 35 remolques. ¿Pero sabes qué? Esta categoría no le aplica a los Piratas.


3. Vigilantes de Texas

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$55,25 millones
90
$614.000

Atención, Cleveland Cavaliers, Toronto Raptors y Denver Nuggets: Si vas a perder a una súper estrella, asegúrate de que recibas algo a cambio. ¿Por ejemplo? Cuando los Vigilantes cambiaron a Mark Teixeira a los Bravos en 2007, recibieron cuatro prospectos por él, incluyendo al campocorto Elvis Andrus y al lanzador Neftalí Féliz. Andrus quedó segundo en el premio de Novato del Año en 2009 en la Americana; Féliz ganó el premio en 2010 y fijó un nuevo récord de rescates para un pitcher novato (40). Mejor aún, Andrus y Féliz recibieron $820.420 entre ambos, una gran aportación en un roster lleno de jugadores buenos a bajo costo, incluyendo al lanzador abridor C.J. Wilson ($3,5 millones), a "todavía le queda algo en el tanque" Vladimir Guerrero ($5,5 millones) y el Jugador Más Valioso Josh Hamilton ($3,25 millones).

Barato y bueno: Texas afianzó 12 victorias y efectividad de 3.72 del lanzador de primera línea Colby Lewis, a quien los Vigilantes reimportaron de Japón por $1,75 millones.


4. Atléticos de Oakland

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$51,65 millones
81
$638.000

Los Atléticos todavía están jugando "Moneyball". ¿Pero cuál es su meta? La amplia diseminación y aceptación del análisis sabermétrico significa que Oakland ya no cuenta con la misma ventaja informática de antes sobre los clubes competidores. Mientras tanto, Oakland todavía es un equipo de pocos recursos monetarios que no puede pagar el precio de mercado para obtener los bates de poder que necesitan con urgencia. Los Atléticos ganaron con defensa y lanzadores jóvenes y baratos; los abridores Dallas Braden, Gio González y Trevor Cahill recibieron $1,24 millones por sus servicios combinados y fueron los líderes de un cuerpo de lanzadores que registró la tercera efectividad más baja de las mayores. Los Atléticos perdieron, sin embargo, por falta de carreras anotadas. La ofensiva del equipo terminó muy cerca del sótano de la Americana con un promedio de 4.04 carreras por partido, y ningún bateador de Oakland superó los 15 jonrones.

Barato y bueno: Braden lanzó un juego perfecto mientras ganó $420.000 de salario en 2010 -- unos $15,3 millones menos que lo recibido por Roy Halladay por hacer los mismo y casi medio millón de dólares menos que lo recibido por el residente de Alabama Wade McGilberry por lanzar un juego perfecto en "MLB 2K10".


5. Marlins de Florida

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$57,03 millones
80
$713.000

Año tras año, los Marlins demuestran tener la aptitud de adquirir y desarrollar jugadores jóvenes a buen precio. Año tras año, el club luce ambivalente -- y se puede decir hasta hostil -- a la hora de gastar dinero para consolidar sus ganancias. Al iniciar la temporada 2010, el bullpen de Florida era debilucho. Los Marlins no hicieron nada, luego sufrieron, y terminaron en segundo lugar en las mayores en rescates desperdiciados. Un roster plagado de compras a baratillo, como el novato Gaby Sánchez ($401.000), terminó a un juego por debajo de .500. El corte de presupuesto de Florida parecía particularmente curioso ante la filtración de documentos financieros que demostraban que el equipo había generado ganancias considerables gracias al aporte colectivo de la liga. ¿Están los Marlins tratando de ser una versión mejorada de los Piratas?

Barato y bueno: El as de la rotación Josh Johnson ganó sólo $3,75 millones.


Los cinco peores


30. Yankees de Nueva York

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$206,33 millones
95
$2,17 millones

No hay ninguna sorpresa aquí. Si los Yankees hubiesen ganado los 162 juegos de la temporada -- algo estadísticamente improbable, no importa cuán encendidas estén las portadas de los diarios -- ellos aún así hubiesen calificado en el puesto No. 23 de esta lista. Por supuesto, el dinero no importa cuando te pones el uniforme de las rayas (a menos que estés en la renegociación de Derek Jeter). Nueva York es un universo aparte en términos financieros, parecido a Wall Street, donde ahorrar meros centavos es para los perdedores y las consecuencias las sufren los tontos. Los Yankees pueden subastar en contra de sí mismos para obtener el talento súper estelar -- ver Rodríguez, Alex, $33 millones. Ellos pueden pagar más que cualquier otro equipo por un as de rotación (CC Sabathia, $24,29 millones). Ellos pueden gastar $5,5 millones por el frecuentemente lesionado Nick Johnson sólo porque sí. ¿Lo único que los Yankees no pudieron lograr a puro billete? Ganar la División Este de la Liga Americana. O una Serie Mundial. Al menos no la pasada temporada.

Derroche: Javier Vázquez recibió $11,5 millones pero no logró calzar la bien remunerada y poco rentable rotación de abridores de los Yankees.


29. Cachorros de Chicago

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$146,61 millones
75
$1,95 millones

Ya basta de la mitología. Los Cachorros no son flojos a causa de Steve Bartman o porque sea un requisito de los dioses del béisbol o por razón de alguna cabra que murió hace ya mucho tiempo. Son pésimos porque son tontos. Consistentemente. Durante la última década, Chicago ha gastado más dinero que el resto de los otros clubes de las mayores excepto por cuatro de ellos. En ese periodo, los Cachorros han llegado tres veces a los playoffs. ¿Traducción? Entrégale automóviles gratis a los Cachorros, y de alguna manera llegarán a los estudios de Oprah con habichuelas mágicas. Considera el roster de los Cachorros de 2010: $18 millones por el unidimensional Alfonso Soriano, $18,88 millones por el dolor de cabeza Carlos Zambrano, $14 millones por "él no es tan malo" Kosuke Fukudome. Suma sus salarios y da un total de 50,88 millones -- unos $13 millones más de lo que San Diego pagó por todo su equipo. En los círculos del béisbol, la definición técnica para esto es fracaso.

Derroche: Aramis Ramírez tuvo un mal inicio de temporada -- al batear por menos de .200 en abril y mayo. Aunque jugó mejor el resto del camino, no rindió lo justo por su salario de $16,75 millones.


28. Medias Rojas de Boston

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$162,44 millones
89
$1,83 millones

¡Regocíjate, Nación de los Medias Rojas! Tú puedes volver a quejarte de que el gran, malvado, desalmado club de los Yankees gastó más que tu humilde escuadra de jugadores adorables con menos oportunidad. Sólo ignora que Tampa Bay gastó menos de la mitad de lo que gastó Boston … y sin embargo ganó siete juegos más. En defensa de los Medias Rojas, las lesiones los afectaron muchísimo, mientras los lanzadores Josh Beckett ($12,1 millones) y Daisuke Matsuzaka ($8,33 millones) realizaron sólo 44 aperturas entre ambos y los valiosos Dustin Pedroia (un baratillo por $3,75 millones) y Kevin Youkilis ($9,38 millones) se perdieron demasiados juegos. Más preocupante aún fue el desempeño del cerrador Jonathan Papelbon, quien recibió $9,35 millones al despilfarrar siete salvamentos, perder seis juegos y registrar la efectividad más alta de su carrera.

Derroche: Con un salario de $18,7 millones, John Lackey fue el jugador mejor pagado de Boston. Con efectividad de 4.40, es duro señalarlo como el mejor lanzador de los Medias Rojas.


27. Mets de Nueva York

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$134,42 millones
79
$1,7 millones

Malgastan el dinero como si fueran la respuesta a los Yankees en la Liga Nacional, ganan juegos como … los Cachorros de la Liga Nacional. De hecho, olvida eso -- los Mets gastaron más que los Cachorros durante la pasada década y llegaron a los playoffs exactamente una vez. ¡Rayos!. Al igual que los Cachorros, el roster de los Mets fue una isla financiera de juguetes inadaptables: $20,14 millones por el lesionado Johan Santana; $19,4 millones por un incómodo Carlos Beltrán; $8,63 millones por el cerebralmente conmocionado Jason Bay; $12,17 millones por el cerrador desenfocado Francisco Rodríguez. Ah, y no te olvides de los $12 millones de Oliver Pérez, quien registró marca de 0-5 con 6.80 de efectividad. Para ponerlo de otra forma: Si el ex gerente general Omar Minaya fuera el encargado de las operaciones en Citibank en vez de en Citi Field, el programa de asistencia bancaria del gobierno (TARP, por sus siglas en inglés) estaría en quiebra.

Derroche: Como si lo anterior no fuera suficiente, el segunda base de 35 años Luis Castillo -- ¡ganador del Guante de Oro en 2005! -- recibió $6,25 millones.


26. Tigres de Detroit

Nómina
Victorias
Costo por victoria
$122,86 millones
81
$1,52 millones

Los Tigres estaban a 10 partidos sobre .500 en el receso del Juego de Estrellas. Luego se desplomaron, en parte por las lesiones de Magglio Ordóñez ($17,83 millones), Carlos Guillén ($13 millones) y Joel Zumaya (un regalo por $915.000), en parte porque el lanzador demasiado bien pago Jeremy Bonderman ($12,5 millones), el bateador designado Johnny Damon ($8 millones) y el tercera base Brandon Inge ($6,6 millones) rindieron muy poco por su salario.

Derroche: Luego de designar a Dontrelle Willis para ser enviado a las menores, Detroit cambió al pitcher descontrolado a Arizona, donde alegadamente acordaron pagarle los $12 millones de su salario excepto por $263.000.


El resto de las mayores


Calificación Equipo Nómina Victorias Costo/victoria Comentario

6.

Azulejos

$62,23MM

85

$732KK
El cambio reciente del decaído Vernon Wells ($15,69MM; $23MM en 2011) podría hacer más eficiente las finanzas de los Azulejos.


7.

Rays

$71,92MM

96

$749KK
Los Rays se tomaron el riesgo de firmar a Evan Longoria ($950KK) a un contrato de largo plazo luego de sus primeros años en las mayores; ahora el estelar 3B es posiblemente el mejor jugador por ese precio.

8.

Rojos

$71,76M

91

$789KK
Joey Votto fue Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, pero sólo ganó $525KK.

9.

Indios

$61,20MM

69

$887KK
Ya no es el equipo que gastaba mucho a final de la década de 1990. Tampoco es un contendiente.

10.

Nacionales

$61,4MM

69

$890KK
El contrato de Jayson Werth por siete años y $126MM elevará la nómina de los Nacionales. ¿Elevará también el total de victorias?

11.

Bravos

$84,42MM

91

$928KK
Ningún contrato de la Nacional fue mejor que el del joven toletero Jayson Heyward por $400KK.

12.

Diamondbacks

$60,72MM

65

$934KK
Arizona descargó a sus tres lanzadores mejor pagados -- Brandon Webb, Dan Haren, Edwin Jackson -- y cortó $21,35MM en nómina.

13.

Rockies

$84,23MM

83

$1,01MM
El contendiente para el Cy Young Ubaldo Jimenez recibió $1,25MM, unos $66KK por victoria.

14.

Mellizos

$97,56MM

94

$1,04MM
El salario de Jim Thome por $1,5MM fue dinero bien invertido.

15.

Cerveceros

$81,11MM

77

$1,05MM
Pagar solamente $1,29MM por el estelar Ryan Braun fue bueno; pagar $12,75MM por Jeff Suppan no lo fue.

16.

Reales

$71,41MM

67

$1,066MM
El jardinero José Guillén recibió $12MM en 2010. Afortunadamente, los Gigantes pagaron una parte de su salario.

17.

Gigantes

$98,64MM

92

$1,072MM
Y pensar que Zito y su salario de $18,5MM fueron dejados fuera del roster de postemporada.

18.

Cardenales

$93,54MM

86

$1,09MM
Adam Wainwright recibió $4,84MM, y ganó 20 partidos.

19.

Dodgers

$95,36MM

80

$1,19MM
Clayton Kershaw registró más victorias y menos efectividad que Hiroki Kuroda -- y recibió $14,99MM menos.

20.

Medias Blancas

$105,53MM

88

$1,2MM
Paul Kornerko recibió $12MM y tuvo un año de carrera.

21.

Astros

$92,36MM

76

$1,22MM
La mala actuación del equipo llevó a los cambios de Lance Berkman ($14,5MM) y Roy Oswalt ($15MM) para cortar la nómina.

22.

Orioles

$81,61MM

66

$1,24MM
Para competir en el Este de la Liga Americana, los Orioles deben dejar de estar firmando a jugadores como Kevin Millwood ($12MM). En su lugar, deberían comprar el departamento de cazatalentos de los Rays.

23.

Angelinos

$104,96MM

80

$1,31MM
Jered Weaver salió buenísimo por $4,27MM; Scott Kazmir fue un desastre por $8MM.

24.

Marineros

$86,51MM

61

$1,42MM
¿Milton Bradley por $11MM? Ni siquiera con dinero de Monopolio.

25.

Filis

$141,92MM

97

$1,46MM
¿Acaso su núcleo envejecido y su caída en el campeonato de la Liga Nacional indica que el club estará pagando demasiado dinero por actuaciones pasadas?

NBA: Manu Ginóbili anotó 22 puntos en triunfo contra Rockets


Manu Ginóbili convirtió 22 puntos el sábado y los San Antonio Spurs se erigieron en el primer equipo con 40 victorias en la temporada al doblegar 108-95 a los Houston Rockets, pese a las 23 unidades de Luis Scola.

Richard Jefferson agregó 18 puntos para que los Spurs se apuntaran su 18vo triunfo al hilo en casa. Pero fue el último partido de San Antonio en el AT&T Center durante tres semanas mientras se embarca a partir del martes en una gira.

Los Spurs, con la mejor foja (40-7) en la campaña de la NBA, jugarán nueve encuentros seguidos como visitantes antes del Partido de Estrellas, en el cual el entrenador de San Antonio, Gregg Popovich, dirigirá al equipo de la división Oeste.

El argentino Ginóbili jugó 29:31 minutos como escolta titular con San Antonio y colaboró también con cuatro asistencias y un rebote.

El suplente brasileño Thiago Splitter anotó tres puntos y tomó tres rebotes para los Spurs en 14:11 minutos.

El argentino Scola, en sus 35:45 minutos como alero titular, fue el mejor de los Rockets con sus 23 puntos y 10 rebotes. También entregó una asistencia.

Houston ha perdido cuatro de seis.

sábado, 29 de enero de 2011

NHL Burns, Havlat represent Wild at NHL All-Star game

Brent Burns and Martin Havlat are representing the Minnesota Wild this weekend at the NHL All-Star game.

Burns was originally picked as a defenseman, and Havlat was an injury replacement as a forward. This is the second time in the team's 10-year history that the Wild have sent two players to an All-Star game.

The format for the game was changed this year, with a pair of captains choosing the two sides in a special draft. The skills competition is Saturday and the actual game is Sunday.

NFL La historia Mike McCarthy como entrenador de Green Bay comienza en Pittsburgh

El niño recibió un jersey de Jack Lambert para Navidad. Tenía 17 años cuando su padre cargó a la familia, a los siete integrantes, y siguió el río Monongahela hacia a las luces de la ciudad para ver el estreno de una película de los Pittsburgh Steelers.

Se crió en un barrio de colinas sinuosas y casas prácticas de donde la gente nunca se va, ni piensa en irse, porque es su hogar. Su madre y su padre nacieron aquí, en un barrio obrero llamado Greenfield, y ahí es donde han permanecido durante casi siete décadas. Sus domingos eran todo un ritual: la iglesia, las tareas hogareñas y un gran apuro para terminar todo antes de la una de la tarde porque a esa hora jugaban los Steelers.

Su lealtad era inmortal. Dondequiera que fuera, contaba historias sobre lo dura que era la gente de Pittsburgh. Cuando se convirtió en entrenador de fútbol americano, inspiraba así a sus equipos, con cuentos de esta ciudad. Les despertaba el deseo de destruir a sus oponentes. Les hacía sentir que podía hacer cualquier cosa.

Dentro de una semana, el hijo nativo de Pittsburgh estará en todas sus pantallas de televisión. Mike McCarthy entrará al campo de juego con sus Green Bay Packers. Será su primera aparición en un Super Bowl. Y durante 60 minutos, McCarthy tramará, improvisará y creará estrategias, haciendo todo lo posible para vencer a los mismísimos Steelers.

Mike McCarthy
Getty ImagesMcCarthy dirige a los Packers desde el 2006

Los hombres que lo formaron

¿Qué se siente ser Mike McCarthy? ¿Estar a pocos días del juego con el que ha soñado toda su vida? ¿Y jugar ese partido contra la franquicia que lo hizo amar el fútbol americano? McCarthy es entrenador de fútbol, así que te dará una respuesta en paquete sobre el entusiasmo de estar aquí y lo concentrado que está en el desafío que le espera.

Tal vez las respuestas más profundas se encuentren aquí, en Pittsburgh, adonde dos hombres moldearon la primera parte de la vida de Mike McCarthy. Joe McCarthy en realidad no quiere hablar, pero eventualmente cederá, después de un par de llamadas telefónicas. Es un hombre tranquilo que, al igual que su hijo, prefiere estar solo para hacer su trabajo. Fue policía, bombero y dueño de un bar en su juventud, cualquier cosa para mantener a su familia. Ha vivido con su esposa, Ellen, en la misma casa de Greenfield Avenue durante 41 años.

Si quieres saber por qué Mike McCarthy solía trabajar toda la noche durante sus días como asistente de la NFL en Kansas City, por qué se ofreció a trabajar gratis en su primer puesto de entrenador, las respuestas se encuentran en Joe. El padre es un comprometido católico irlandés quien les enseñó a sus cinco hijos a ser independientes. A hacerse su propio camino.

Joe volteaba casas para complementar el ingreso familiar, y Ellen trabajaba de secretaria y en restaurantes. Pasaban su tiempo libre --el poco que tenían-- mirando a sus hijos practicar deportes.

"Greenfield era un lugar único", dijo Mike McCarthy. "Pittsburgh era muy próspero en ese momento con la industria del acero. Había niños en todas partes. En realidad, ese es mi vivo recuerdo de Pittsburgh. Todo el mundo estaba involucrado en los deportes; a los equipos profesionales les iba muy bien.

"Era una comunidad muy unida, y no salías mucho de Greenfield. Fue una gran cosa subir a un autobús para ir al centro de Pittsburgh a ver la primera función del sábado. No solíamos salir de Greenfield porque ahí teníamos todo".

Desde la cima de las colinas, McCarthy podía ver el horizonte de Pittsburgh. El bar de su padre se encontraba colina abajo, en una zona que los locales denominan "The Run". Los hombres de J&L Steel Works solían llenar el bar de Joe McCarthy los fines de semana, y sus hijos limpiaban el lugar los domingos después de misa.

Casi todo el barrio conoce a los McCarthy. "Familia sólida", es lo que sale primero de la boca de la mayoría de los residentes a quienes se les pide una descripción. "Tranquilos", suele ser la siguiente articulación.

"Mike era un niño muy feliz", dijo JoAnne Klimovich Harrop, escritora del Pittsburgh Tribune-Review quien fue a la escuela primaria con McCarthy. "Siempre sonreía mucho. Creo que eso viene de su familia".

Está claro que están orgullosos de cada uno de sus hijos. Joe señala que su hija mayor, Colleen, es maestra de escuela. Diecisiete miembros de la familia viajaron a Chicago para ver a los Packers vencer a los Bears y llevarse su primer boleto de Super Bowl desde 1998.

Desde entonces, todo ha sido una masa de llamadas telefónicas, ráfagas de adrenalina y alianzas mixtas. Joe tiene una fotografía sobre su mesa. Es de la familia en el Super Bowl XL en Detroit. Están agarrando una Toalla Terrible, animando a los Steelers, que derrotaron a Seattle aquella noche.

Chuck Noll
US PresswireEl legendario Noll ha sido uno de los mayores ídolos de McCarthy

Pero ahora, los Packers vienen primero y los Steelers segundos. En su puerta hay una bufanda que dice "Go Pack Go".

"[El domingo] fue pura alegría y diversión para todos", dijo Joe. "Pero igual, creo... todavía no caigo del todo. Sé que van al Super Bowl. Mi esposa y todos mis hijos iremos al Super Bowl, y va a ser un momento muy emocionante para la familia. Todos están orgullosos de Mike. Estamos muy orgullosos de él".

Pero volvamos a la otra influencia de Mike McCarthy en su infancia. Es un hombre al que veía por televisión todos los domingos. Un hombre llamado Chuck Noll. Algunos dicen que sus estilos de entrenamiento son similares, y hasta su forma de manejarse en los laterales. Ya no se habla mucho de Noll, quien condujo a los Steelers a cuatro campeonatos de Super Bowl. Tal vez porque no era animado o demostrativo y no se mostraba mucho en público.

McCarthy, de 47 años, es igual. Es tranquilo en los laterales, casi inexpresivo. Rara vez se pasa o se queda corto, y enseña a sus jugadores a ser constantes. Vio a Noll hacer eso.

"Lo que siempre recuerdo de Coach Noll es que nunca aparecía en los comerciales", dijo McCarthy. "No estaba en el centro de atención. Claramente, lo que le importaba era ganar campeonatos. Creo que tengo una personalidad muy similar. En la NFL de hoy en día se le da mucho más exposición y atención a todo, pero yo prefiero quedarme con el aspecto técnico.

"Definitivamente lo admiraba. Él era el modelo. Era el entrenador de los Pittsburgh Steelers, y se representaba como se supone que debe ser".

Jim Gregg
ESPN.comGregg dirigió a McCarthy en béisbol y básquetbol

Los primeros años

Jim Gregg ha sido entrenador en St. Rosalia School durante más de cuatro décadas, y puede recitar números de jerseys de la década de los '70. Ha entrenado a niños que luego tuvieron hijos que ya jugaron para él y siguieron adelante. Lleva un silbato en el cuello casi todo el tiempo. La cuerda es color verde y oro. Tiene el logo de los Green Bay Packers.

Gregg era director adjunto de una prisión, pero se retiró cuando un cáncer de hueso acabó con su cadera y lo obligó a caminar con bastón. Nunca tuvo hijos. Los muchachos de St. Rosalia son sus hijos. Y por Mike McCarthy, Jim Gregg vestirá el equipo de los Packers el 6 de febrero y alentará en contra de sus amados Steelers.

"Estoy muy orgulloso de que me asocien con él", dijo Gregg. "Es una excelente persona. Ha dejado la comunidad, pero aún recuerda de dónde salió. Ha sido muy generoso".

St. Rosalía, que se encuentra, por supuesto, en la Avenida Greenfield, se asemeja a una cápsula del tiempo sellada en 1973. Hay azulejos verdes en las paredes y olor a libros viejos en el aire. Los niños salen del colegio usando sus uniformes, obedientemente y en orden, al igual que lo hicieron sus padres en su momento.

St. Rosalía
ESPN.comEn St. Rosalía apoyan fervientemente a Steelers...

La escuela preparatorio de McCarthy, Bishop Boyle, cerró en 1987. Así que esta es la única verdadera alma mater del entrenador que queda en Pittsburgh. Vuelve de vez en cuando y se lo puede ver en la iglesia con sus padres. Cuando los Packers lo convirtieron en su entrenador en jefe en 2006, no se olvidó de St. Rosalía. Incluyó una donación anual al colegio en su contrato, con un acuerdo de que los Packers cumplirían con su promesa.

El regalo ha ayudado al establecimiento, que ha visto caer en picado el número de matriculados, de 600 estudiantes durante los días de McCarthy a 175. Para Dara Pegher, ha ayudado a su familia. Pegher se graduó de St. Rosalía y dice que la donación del entrenador ha hecho que la matriculación de su hija fuese más accesible. Ese fue el destino de la mayor parte del regalo de McCarthy: ayudar a los padres para que pudiesen enviar a sus hijos a la escuela que él ama.

St. Rosalía
ESPN.com... pero también hay lugar para los Packers

El lunes, Pegher, presidenta de la comisión de padres y maestros, se paró en la puerta de St. Rosalía, cerca de una fotografía de McCarthy. Se le acercó un sacerdote que bromeó y le preguntó de qué color iba a vestir para la misa del domingo: ¿verde o negro?

Verde, dijo Pegher.

"¿Sabes qué? Cuando empezó ese juego", dijo Pegher, "tenía lágrimas en los ojos. Porque él ha trabajado tan duro. Y lo que ha hecho por esta escuela es un regalo como ningún otro.

"Las oraciones tuvieron su respuesta".

¿Dónde ha trabajado?

Le harán esta pregunta por lo menos unas diez veces la semana que viene, durante el bombardeo de los medios de comunicación previo al Super Bowl, y McCarthy, sin duda, mirará hacia el cielo y suspirará. Se pregunta por qué los periodistas están tan obsesionados con el hecho de que haya trabajado en una caseta de peaje hace muchos años. ¿No es que todo el mundo, en algún momento, tiene un trabajo como ese cuando es joven?

Bueno, no exactamente. McCarthy no sólo tomaba el dinero y los boletos de peaje en la salida de Allegheny Valley en la autopista de Pennsylvania en 1989. Lo hacía en la oscuridad de la noche, cuando sus amigos veinteañeros bebían y hacían vidas de veinteañeros, mientras que Pittsburgh dormía.

Mike McCarthy
BakerMcCarthy jugó como ala cerrada para la diminuta Baker University

A veces, antes que el sol se elevara sobre los Alleghenies, había interminables momentos de silencio oscuro. Pero McCarthy, un ex ala cerrada de Baker Univerity en Kansas, no haraganeaba en la caseta de ladrillo unos 6 por 6. Hojeaba el libro de jugadas de Paul Hackett, su nuevo jefe en su nuevo trabajo en University of Pittsburgh. Luego agarraba sus cosas y se dirigía a su trabajo de día.

Incluso entonces, la gente sabía McCarthy iba a algún lugar. En silencio, y rápidamente se convirtió en la mano derecha de Hackett. Compartía una oficina con un joven llamado, Chris Petersen, en 1992. Petersen, que ahora está en Boise State, entró en la oficina el primer día y, como la mayoría de los entrenadores, de inmediato quiso averiguar quién era realmente McCarthy. Así que le preguntó.

"Voy a ir a la NFL", le dijo McCarthy. "Eso va a ser lo mío".

El comentario hizo reír un poco a Petersen.

"En esos tiempos los dos éramos unos meros empleados de último rango", dijo Petersen. "Teníamos la suerte de estar allí. Tenía esa mirada en sus ojos, y eso es lo que él iba a ser. Estaba tan decidido y tan concentrado. Era muy diligente en el aprendizaje".

Estaba tan emocionado de formar parte de Pittsburgh. Hablaba con Petersen sobre la cultura de la ciudad, los restaurantes, la gente, y, por supuesto, el fútbol americano.

Había tanta gente entre el personal de Pitt que estaba destinada a llegar lejos, muchachos como Jon Gruden, Marvin Lewis y Sal Sunseri. McCarthy pasaba entre ellos como uno de los menos visibles. Pero los jugadores sabían todo sobre él.

Una vez en las prácticas, quiso enseñar a los receptores la forma correcta de bloqueo. Así que cogió un casco y un cojín y los enfrentó, porque esa era la mejor manera de enseñar. Apareció un día muy enfermo, chorreando de sudor. Pero McCarthy entregó los libros de jugadas de todos modos, dice el ex mariscal de Pitt, Alex Van Pelt, porque eso es lo que tenía que hacer.

"Siempre se aseguraba de tener la mejor respuesta posible para que todos pudiesen hacer su trabajo de la mejor manera", dijo Van Pelt. "Creo que eso se refleja en sus raíces, en su formación en Pittsburgh.

"Es la mentalidad de la zona. Incluso cuando estás en tocando fondo, no estás fuera. Pasas por eso, lo atraviesas. Y eso es algo que Pittsburgh, como ciudad, ha hecho en los últimos 20 años. Ellos se establecieron de nuevo, trabajaron pasando por tiempos difíciles con las fábricas de acero y realmente salieron del otro lado. Es simplemente la mentalidad de la gente".

El equipo que aman, el hombre que conocen

Para encontrar el viejo bar de Joe McCarthy en la noche necesitas un GPS y un buen sentido de la ubicación. Se encuentra en la parte baja de Greenfield, en una hilera de casas de aspecto similar. Los actuales propietarios colgaron un cartel, algo que ayuda para poder ubicar el sitio. El lugar se llama "Chasers in the Run" ahora, pero no es tan diferente de lo que era los viejos tiempos.

Hay una mesa de billar, similar a la que se subían los hijos de Joe para jugar cuando trabajaban los domingos. Hay carteles de los Steelers en las paredes. En la planta baja, el techo es de lata. Uno de los actuales propietarios del bar, Robert "Murph" McKeown, escuchó una vez que el lugar era un bar clandestino en la década de 1920. Abre a las 8 a.m., como lo ha hecho durante años, y la multitud de trabajadores del acero a la hora del almuerzo ha sido reemplazada por médicos y estudiantes universitarios.

Pero por la noche, los vecinos y clientes habituales regresan al lugar. Un tipo llamado Bob, que está bebiendo de una pinta de cerveza, viene a este bar desde hace años. Por supuesto, recuerda un poco a Mike McCarthy. De alguna manera, incluso entonces, Bob sabía que el chico no estaba hecho para ser un camarero. Oh, era muy organizado. Hacia todo en este bar: servía bebidas, limpiaba las mesas, barría los pisos, limpiaba los baños.

El 6 de febrero, estará en los televisores del lugar, y los clientes alentarán a ambos bandos. Por el equipo de sus amores y por el hombre que tan bien conocen.

"Mike es una de las mejores personas que conozco", dijo Bob. "Digámoslo de esta manera: si los Steelers no estuviesen en el Super Bowl, me gustaría que gane él. Se lo merece".