La NBA contará con 113 jugadores no estadounidenses esta temporada. Es el tercer año seguido en el que hay al menos 100: en 2014-2015 fueron 101 y en la siguiente se llegó a la centena. Además, es la primera vez en la historia que cada una de las 30 franquicias tienen al menos un jugador nacido fuera de los Estados Unidos. Europa con 62 representantes y África, con 13, baten un registro que contará con 41 países y territorios representados. Por parte de Sudamérica se destaca el cuarteto argentino encabezado por Emanuel Ginóbili y Luis Scola.
Una fuerte presencia europea. El equipo que más extracomunitarios tiene entre sus filas es Utah Jazz con siete, que cuenta con Joe Ingles y Dante Exum (Australia), Boris Diaw y Rudy Gobert (Francia), Raulzinho Neto (Brasil), Trey Lines (Canadá) y Joel Bolomboy (Ucrania). Con seis están Dallas Mavericks, Denver Nuggets, Oklahoma City Thunder, Orlando Magic, Philadelphia 76ers, San Antonio Spurs y Toronto Raptors. En cuanto a los países más representados, en el primer puesto se encuentra por tercer año consecutivo Canadá con 11. Francia y España, que tienen cada uno 10 representantes, comparten el segundo puesto de la clasificación. En el caso de los españoles es un récord. A los Pau (Spurs) y Marc Gasol (Grizzlies), Ricky Rubio (Timberwolves), José Manuel Calderón (Lakers), Serge Ibaka (Magic) y Nikola Mirotic (Bulls) se unen este curso los debutantes Juancho (Nuggets) y Willy Hernangómez (Knicks) y Álex Abrines (Thunder). Además, Sergio Rodríguez (Sixers) repite tras seis años en el Real Madrid.
Un cuarteto argentino que pesa. Emanuel Ginóbili nunca pensó que ganaría cuatro títulos (2003, 2005, 2007 y 2014) en la mejor liga del mundo como que difícilmente creyera que una temporada más era posible después de la 2015-2016. Sin embargo, ahí está, ya sin uno de los tres mosqueteros que lideraron -con el entrenador Gregg Popovich al timón- una de las grandes revoluciones en el deporte estadounidense del nuevo siglo, un cambio de paradigma basquetbolístico que los condujo a la gloria en reiteradas ocasiones. Tim Duncan ya es historia en San Antonio, pero Manu, con 39 años, decidió continuar al menos una temporada más (su decimoquinta). Será, junto a Tony Parker, el comandante dentro del parquet de la franquicia más potente de los últimos 17 años. También en San Antonio estará Nicolás Laprovíttola, el último argentino en meterse en la NBA. Con Parker como base inamovible de los Spurs y el australiano Patty Mills establecido como suplente, el ex Lanús, Flamengo y Estudiantes de Madrid deberá aguardar una chance.
“Es impresionante cómo empuja a los jóvenes, es un monstruo”. La frase es de Rondae Hollis-Jefferson, un chico de Brooklyn Nets que comienza a transitar su segundo año en la NBA. Apenas un par de semanas de trabajo en conjunto le bastaron para conocer a Luis Scola y elogiar su actitud respecto a los más jóvenes. No es que el ala pivote sea Superman en la selección argentina y se vuelva a poner el traje de Clark Kent cuando retorna a su equipo. Su dedicación es una constante y apuntalar a los que arrancan, una parte fundamental de su manera de encarar el deporte. Para Nicolás Brussino prácticamente todo será positivo. En cuestión de horas, el escolta dio dos pasos gigantes en el mundo NBA: se garantizó su contrato, lo que casi le aseguró permanecer en la órbita, y se ganó un lugar en el plantel de 15. El entrenador Rick Carlisle, uno de los que goza de mejor consideración en el ambiente, lo llevará de a poco y se tomará su tiempo para que fortalezca el físico, ya que saltó directo de Peñarol de Mar del Plata al certamen top.
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