Mientras la NFL sigue en cierre patronal, sus jugadores siguen probando otras actividades.
Edwards
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Ray Edwards, ala defensiva de los Vikings, se convirtió en el segundo jugador activo en subirse a un cuadrilátero de boxeo, siguiendo el camino de Tom Zbikowski, profundo de los Ravens.
Edwards comenzó su carrera boxística de manera positiva, consiguiendo una victoria por decisión unánime, en una pelea de pesos pesados a cuatro rounds en Hinckley, Minnesota.
Las tarjetas de los jueces favorecieron a Edwards 40 a 34, 39 a 35 y 40 a 34, luego de que le jugador derribara al ex kickboxer amateur T.J. Gibson en el primero y en el cuarto asaltos, ante una concurrencia que casi llenó el Grand Casino, con varios de sus compañeros de los Vikings apoyándolo en las gradas.
"Tengo algunas cosas en las que debo trabajar, pero en general creo que lo hice bien", dijo el jugador al periódico St. Paul Pioneer Press.
Jasper Brinkley, apoyador de los Vikings, dijo al Pioneer Press que estaba impresionado con el trabajo de Edwards.
"Es un poco raro ver a un compañero ahí", dijo Brinkley. "Pero creo que lo hizo muy bien".
En el rincón del jugador, el entrenador Jeff Warner, ex boxeador de los pesos pesados y luchador profesional, describió el jab de Edwards como "increíble" y dijo que los presentes pudieron ver "un 70 por ciento de Ray Edwards. La gente no entiende una primera pelea profesional, hay tantas emociones diferentes. Ya terminó eso, ahora sigamos adelante".
Edwards firmó un contrato por dos peleas, con 5,000 dólares garantizados más 50 por ciento de la venta de entradas, según le dijo al periódico Star Tribune.
El corpulento Edwards tenía una ventaja considerable en tamaño y peso sobre Gibson, quien también peleó por primera vez. Edwards se dijo feliz de ganar pero admitió que fue "un poco más difícil de lo que esperaba".
"Cada vez que traté de ponerme debajo de él, me detenía y no podía hacer lo que quería", señaló Gibson. "Va a ser un buen peleador si continúa".
Edwards derribó a Gibson en el primer asalto con una combinación de izquierda-derecha que envió al más pequeño de los dos a las cuerdas. Luego de que el segundo y tercer rounds no ofrecieran mucha acción, el jugador casi saca a Gibson del ring con un gancho de izquierda.
Ningún entrenador u oficial del equipo asistió a la pelea, lo cual le pareció bien a Edwards, quien boxeará de nueva cuenta el 24 de junio en Hinckley, si el paro laboral continúa, ante un rival por determinar.
"Es lo que es", dijo. "Es un negocio, no hay resentimientos. Aún hablo con ellos cuando puedo. Cuando sea que el paro termine, aún tendré una buena relación con ellos. Me ayudaron a iniciar mi carrera, con la que soñaba desde que era niño".
Edwards ha dicho que dejará a los Vikings si se convierte en agente libre sin restricciones cuando se resuelva la situación laboral de la NFL y se dedicará al boxeo si no lo es.
"Es algo que siempre quise hacer en mi vida," dijo Edwards sobre el boxeo. "No puedo poner todos mis huevos en una canasta, esperando a que la NFL resuelva el paro laboral. Nadie sabe cuándo terminará este paro laboral".
Edwards, de 26 años de edad, tiene solo 8 por ciento de grasa corporal y pesa 255 libras, alrededor de 13 libras debajo de su peso cuando está jugando.
El peligro de lesionarse no asusta a Edwards, quien reveló que ha incorporado el boxeo a su régimen de entrenamiento desde hace cuatro años.
Por su parte, Zbikowski ya ha peleado cuatro veces y tiene marca de 4-0 como boxeador profesional.
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