La próxima vez que mires jugar a DeMarcus Cousins, intentan analizarlo usando una sola palabra a la vez. Es un ejercicio que hago al evaluar a los jugadores. Esto es lo que pude armar cuando lo vi jugar en persona el miércoles pasado ante Orlando: gigante, perezoso, talentoso, infantil, físico, corajudo, visión, anticipación, perdido, diferente, ágil. Creo que tu usarías las mismas palabras después de observarlo.
A diferencia de muchos grandotes que han entrado en la liga, Cousins ya cuenta con un cuerpo y un juego de NBA. Su talento sobresale en las grabaciones, en las estadísticas y en la cancha. Desafortunadamente, también lo hacen sus fallas, en especial el problema "entre las orejas". Todos los jugadores con los que he hablado esta temporada me han dicho que tiene el peor lenguaje corporal y la peor expresión facial que cualquier jugador que hayan visto en acción en la NBA. Y he podido ver mucho de eso cuando lo vi de cerca.
De modo que la pregunta es la siguiente: ¿podrá solucionar sus fallas para convertirse en una verdadera estrella de la liga o sus problemas de inmadurez lo dejarán atrás?
Echemos un vistazo a tres áreas en las que los Kings deberán trabajar.
1. Mentalidad
¿Quieres pensar qué es lo que Cousins tenía en mente antes de enfrentar al mejor centro del mundo, Dwight Howard? Esta era la escena cerca de dos horas antes de que el partido arrancase en Orlando:
Los jugadores de Orlando, Jameer Nelson, y Earl Clark, estaban al costado de la cancha con los hombres de Sacramento, Cousins yBeno Udrih del otro lado. En el centro del campo había un grupo de bateristas colegiales y otros miembros de la banda marchando al son de la música practicando su performance del descanso.
Tres jugadores estaban practicando y sudando mientras hacían sus tiros antes del partido, completamente concentrados en convertir cada lanzamiento sin mostrar señales de estar al tanto de lo que ocurría en la mitad de cancha ni cuál la música de hip-hop que estaban pasando en el estadio. Un jugador, sin embargo, bailaba sin parar al ritmo de la música.
Cousins.
Estaba haciendo las prácticas de lanzamientos, como es de costumbre, un jugador tiene que hacer diez lanzamientos desde un lugar antes de pasar al siguiente. Pero cuando los tambores comenzaron a sonar, Cousins inmediatamente miró en la dirección y comenzó a bailar no alocadamente ni de manera graciosa, pero moviéndose al ritmo de la música. Después de unos segundos, retomó los lanzamientos, pero de a ratos, entre tiro y tiro, se movía siguiendo el ritmo. En un momento, detuvo su rutina para verlos en acción.
¿Por qué esto es un problema?
Primero, seamos claros en algo no es el único que baila antes de los partidos. Sin embargo, los veteranos que lo hacen se pueden dar el lujo de divertirse sin que eso recaiga en su producción general. Puede que este, algún día, sea el caso de Cousins, pero lo cierto es que ese día aún está lejos.
Considera el sentido que tienen las prácticas de lanzamientos y Cousins no las aprovechó porque estaba mucho más concentrado en la música que en sus tiros. Consecuentemente, durante su rutina, su mecánica cambió dramáticamente después de cada tiro que hizo. Aún no cuenta con un toque respetable. No me sorprendió que haya errado algunos de sus tiros en salto abiertos durante el partido, a pesar de que sea talentoso como francotirador. De muchas maneras, esto describe muchos de los problemas de Cousins: Todavía no se comporta como profesional.
La mayoría de los jugadores buenos como Ray Allen y Shane Battier cuentan con una rutina anterior al partido muy rígida, que arranca en la mañana del partido y se extiende hasta que comienza el mismo. Estas rutinas varían de profesional a profesional, pero todas están perfectamente planeadas.
Cousins se beneficiaría mucho de hacer lo mismo (más tarde nos concentraremos en este tema). Es el mejor talento de los Kings, en mi opinión, pero no es lo suficientemente bueno como para entrar en el juego sin la preparación antes del partido y de todas maneras esperar poder superar a buenos equipos.
La semana pasada, me hubiese encantado ver a Cousins concentrado en hacer diez tiros al hilo consecutivamente desde cada posición, en vez de lanzar simplemente porque se supone que eso es lo que tiene que hacer antes de arrancar el enfrentamiento. Luego podría haber trabajado en amagues de ataque al aro (imaginando a Howard marcándolo) o haciendo tiros de espaldas al aro.
En conclusión, Cousins es una persona muy agradable que quiere hacer lo correcto. Pero por el momento sigue actuando como si aún estuviese en el colegio, sin darse cuenta de que hay alguien que le está pagando millones por hacer su trabajo.
Sus pucheros y malas caras también son un problema. Reacciona muy abiertamente, y mucho más que cualquier jugador que haya visto dejando de lado aRasheed Wallace. Pero Wallace ha demostrado que es capaz de jugar a un buen nivel a pesar de sus berrinches, y a pesar de que quedaría dentro de mi lista personal top 5 de "los jugadores que han logrado menos de los esperado en los últimos 15 años".
Seria naíf esperar resultados similares de parte de Cousins, quien necesita dosis consistentes de enseñanza por el momento. La otra noche fuimos testigos de un ejemplo de esto:
Con unos diez minutos por jugar en el tercer cuarto en un partido ajustado, Cousins estaba marcando a Howard y llegó al centro de Orlando mientras intentó agarrar un pase a unos 16 pies del aro; Cousins cometió su cuarta falta una obvia para todos los que estaban mirando y reaccionó con su usual manera petulante. Mientras caminaba a la banca para ser sustituido, Westphal dijo dos veces, "fue un cobro innecesario" sin mirar a Cousins, quien tampoco miro a su entrenador.
Lo que Cousins necesitaba era a su entrenador mirándolo a los ojos y diciéndole, "No me importa si en el partido aún no has tenido faltas. No queremos que arriesgues una falta ante Dwight Howard a 16 pies del aro, a menos que tengas un camino abierto en la línea del balón".
Es posible que Westphal le haya dado a Cousins ese discurso unas 1,000 veces esta temporada y que esté cansado de repetir lo mismo (Cousins lidera la liga en faltas por partido), pero nunca sabes cuándo hará el click. Como dice el dicho, "El trabajo de un maestro nunca termina".
Westphal, al decirle lo antemencionado, simplemente intentó hacerle creer a Cousins que la liga y los medios lo tienen de punto injustamente. Hacer que Cousins se haga cargo de sus errores, sin embargo, es gran parte de la solución general. Y después de verlo jugar tanto como lo he visto esta temporada, creo que este joven quiere escuchar la verdad, aunque sea dura.
Mientras tanto, la mentalidad amateur de Cousins es algo que sigue afectando a sus compañeros y entrenador. Westphal y Cía. están visiblemente frustrados con algunos de sus caprichos, y Cousins le está sacando energía al equipo.
Pero si Cousins mostrase más concentración y dedicación, permitiría que sus compañeros se concentrasen más en sus trabajos y menos en manejarlo a él. Lo anterior se traduciría en más oportunidades de ganar para una franquicia intentado salvarse del traslado.
2. Body
Algo que no se puede pasar por alto al ver jugar a Cousins es lo poco que corre con velocidad, o siquiera recorre el campo de juego. Su velocidad favorita es el trote, intercalándolo con caminatas o simplemente quedándose parado por momentos. El Magic anotó una buena cantidad de puntos en la transición o en la ofensiva al comienzo del juego porque Cousins no regresaba o sólo lo hacía después de trotar y darse cuenta de que lo necesitaban. Demasiado tarde. También se queda parado demasiado tiempo en la mitad de cancha, mirando en vez de hacer algo.
Esto ocurre por dos razones, la primera es el hábito. Relativamente rápido y ágil en el colegio secundario, después se tornó más grande y pesado en la universidad y, como resultado, correr se convirtió en una tarea más complicada. Pero trotar por la cancha mientras que John Wall lo pasaba parado hacia el aro no era algo tan grave. Tampoco volver a la defensiva. Por supuesto, era algo que enojaba a Calipari, pero dejarlo en la banca por demasiado tiempo no tenía demasiado sentido. De modo que Cousins se ha acostumbrado a jugar así.
En segundo lugar, Cousins necesita reforzar la parte superior de su cuerpo. Se lo ve mucho mejor que en julio, de modo que sabe qué es lo que tiene que hacer. Pero si puede sacarse de encima unas 10 a 20 libras más y después sumar unas 5 a 8 libras de musculo, su estado físico mejorará en gran medida. Además, una vez que esté más liviano, podría comenzar a crear mejores hábitos de nuevo. Un DeMarcus Cousins más rápido, liviano y en mejor estado presentaría una pesadilla uno a uno para la mayoría de la liga.
Una cuestión más a tener en cuenta: Todos los jugadores jóvenes tienen malos hábitos alimenticios. Demasiada azúcar, poca comida sana y una dieta en general que va de malos alimentos a una desorganización en los momentos de comer. Hacer que Cousins tenga un mejor plan alimentario, entendiendo cómo cocinar y comer sano, rendiría grandes frutos. No sólo contaría con un mejor estado, sino que además hay estudios que han demostrado que una mejor dieta podría ayudar a sus cambios de humor.
3. Plan
Cuando Cousins juega, hace exactamente eso -- juega. Mi intención no es pegarle. Derrick Rose aún juega mucho más de lo que piensa y lee el juego, y se ha desarrollado en uno de los mejores jugadores. Pero Rose también ha construido prioridades en su juego ataques al aro, atraer a dobles marcas para crear oportunidades de lanzamientos para sus compañeros, arrastrar los grandotes a la línea de base cuando lo bajan en las pantallas para abrir a su grandote para un tiro en salto. Hay un plan, sin dudas.
Cousins necesita tener un plan específico sobre la mejor manera de utilizar sus fortalezas ante sus oponentes cada noche. El No. 1 debería ser: "Ser la mayor bestia en la pintura en cada posesión".
Si Cousins espera dominar a todos los que enfrente adentro algo que es más que capaz de hacer ante, al menos, la mitad de la liga entonces no estaría a 16 pies del aro. En este momento, hace demasiados tiros largos desde la línea de dos (más de tres por partido mientras que sólo convierte uno por juego) además está empatado en el puesto 41 de la liga en cuanto a promedio de rebotes, detrás de jugadores como Greg Monroe, Ryan Anderson and Kwame Brown. Esto es inaceptable. Tener un plan puede cambiar eso.
los jugadores del poste también necesitan un plan cuando tienen el balón en la zona de bloqueo. Los que son geniales dictan el plan de acción poniendo a sus hombres arriba para la primera movida y la contrarrestan cuando es necesario. Para Cousins, es puro cuerpo, brazos, piernas, pies rápidos y talento natural, pero poco juego intelectual. No le podemos echar la culpa por eso son pocos los grandotes de su edad que tienen un plan y, sinceramente, ya es mucho mejor que unos cuantos centros de la NBA en el juego de espaldas al aro.
Pero debido a que es ágil, hay jugadores a los que podría hacer frente en la zona interna y superarlos en velocidad. No tiene que marcar a nadie abajo. Conocer a los equipos oponentes y quiénes serán sus posibles marcas deberían convertirse en parte de su rutina diaria. Esto lo ayudará a decidir al principio si es mejor retroceder o hacer frente a determinados oponentes. Además, podría practicar estas movidas en el poste, mientras que imagina a cada potencial defensor. Antes del partido.
Cousins puede planear su esfuerzo defensivo individual. Recuerda, este es un hombre que no tiene miedo al contacto en ninguna zona. En su primer post-up defensivo versus Howard, Cousins recibió un golpe en cada de parte de Howard pero no tuvo una reacción negativa y mantuvo el enfoque. Lo anterior demuestra que Cousins puede jugar con razonamiento y disciplina, de modo que sus faltas tontas por lo general pueden ser evitadas si piensa mejor las jugadas.
¿Por momentos cometerá faltas al pelear por la posición o por contestar un tiro a la pintura? Por supuesto, eso viene acompañado al territorio. Pero si tuviésemos que estudiar cada falta que ha cometido hasta el momento y sentarnos con un plan por escrito sobre cómo evitar estas jugadas de ahora en más, sus faltas por partido disminuirían en un 25 por ciento.
Mientras pensaba en el enfrentamiento Howard versus Cousins, una idea daba vueltas en mi cabeza. Cousins terminará siendo un asesino de entrenador, uno de esos que acumulan números increíbles debido a su inmenso talento pero que vuelven locos a sus entrenadores por su inconsistencia. O el enfrentamiento Howard-Cousins es uno de los que podremos ver a futuro en un escenario más importante. En un All-Star Game. Quizá hasta podría ser en el 2013. Así de bueno (o malo) podría terminar siendo Cousins.
De modo que todo depende de él, de sus compañeros y de su organización para ayudarlo a llegar al estrellato. De otra manera, probablemente terminará siendo el hombre que los lleve a un lugar más oscuro del que estaban antes de que lo seleccionaran.
Es un talento especial, y esperemos por su propio bien y el de su franquicia que sepa aprender a transitar el camino hacia la grandeza. La NBA es una mejor liga con él en ella, pero si se da cuenta de que ser un profesional porque ahora le pagan por jugar no es lo mismo que actuar como uno todos los días.
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