"Si en una semana no hay ofertas, entonces me retiraré definitivamente del béisbol", agregó.
Guillén, de 34 años, ha jugado 14 temporadas con 10 equipos en las ligas mayores. En el 2010 bateó .258 con 19 jonrones y 77 carreras impulsadas en 148 partidos con Kansas City y San Francisco, pero se perdió toda la postemporada con los Gigantes por una lesión en el cuello.
Además de perderse la marcha de los Gigantes a su primer título en la Serie Mundial en 56 años, Guillén también fue investigado por las autoridades federales por un cargamento de hormonas de crecimiento humano (HGH) alegadamente enviado a su esposa en California.
"Terminé el año muy frustrado, enfrentando la posibilidad de someterme a una operación del cuello y a la distracción de una investigación. No quería saber nada de béisbol y me aislé", dijo Guillén.
"Pero me siento recuperado de las molestias y creo que puedo jugar", dijo Guillén. "Si recibo una oferta atractiva, estoy dispuesto a intentarlo. De lo contrario, sabré que todo ha terminado", agregó.
Guillén dijo que no está preocupado por la investigación federal que lo involucra y que el mes pasado viajó a California para dar su testimonio a las autoridades. Sin importar el estado de ese caso, las Grandes Ligas podrían sancionarlo por violar el programa de prevención de sustancias del béisbol.
"No se me permite hablar del caso", dijo Guillén, quien batea .270 con 214 jonrones y 887 carreras impulsadas en su carrera en las ligas mayores.
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