La policía de Los Angeles detuvo el domingo a un sospechoso de la brutal golpiza que sufrió un simpatizante de los Gigantes de San Francisco luego del partido inaugural de la temporada en el estadio Dodger, dijeron las autoridades.
El hombre fue uno de los varios detenidos para ser interrogados cuando la policía realizó allanamientos relacionados con el caso, dijo el detective José Carillo. Era uno de los dos sospechosos buscados en relación con el ataque del 31 de marzo.
No está claro si los otros detenidos eran posibles testigos o sospechosos de la golpiza que le causó daños cerebrales al simpatizante Brian Stow, dijo el sargento Kunch, que no quiso dar su nombre de pila por reglas de la policía.
Los investigadores realizaron varios cateos en un edificio de departamentos, dijo Kunch, que no podía detallar cuántos detenidos hubo.
La administradora del edificio Maritza Camacho dijo al diario Los Angeles Times que un equipo táctico de la policía ingresó armas en mano al edificio de East Hollywood.
Entre la gente que salió arrestada, había un hombre calvo con tatuajes en su cuello y brazos, según Camacho. Esa descripción parece coincidir con los bocetos de uno de los dos sospechosos que divulgó la policía.
Dos hombres atacaron a Stow, un paramédico de 42 años con dos hijos, en un estacionamiento del estadio de los Dodgers luego del partido contra los Gigantes en el primer día de la temporada de Grandes Ligas.
La semana pasada, los médicos informaron que Stow abre los ojos pero sigue en condición crítica en el Hospital General de San Francisco.
Se habían ofrecido recompensas de más de 200.000 dólares a quien diera información que ayudara a arrestar a los sospechosos.
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